martes, 2 de octubre de 2007

Corrección

Señores de la Rae, yo de nuevo.
¿vieron qué lindas que son esas palabras que suenan como su onomatopeya?
¿vieron qué lindo es que ayuden a su correcta ortografía?
Bueno, matemos dos pájaritos con una sola bala y cambiemos una palabrita muy fastidiosa.

Hacha

Lista de problemas:
Es femenina, pero usa "El" como artículo por la cacofonía clásica de La Hacha.
Tiene una hache que es muda que no corta ni pincha (doble o triple sentido, perdí la cuenta)
No se parece a su onomatopeya.

Propongo su nuevo nombre:

Cha
Ventajas:
Es machito sin conflictos.
Es cortito y cortante. Como tiene que ser.
Su onomatopeya pega (¡y corta!)

Ejemplos de uso:
"Charles Ingalls compró una nueva cha"; "David, pasame el cha"; "el cha golpeaba la madera: ¡cha! ¡cha! ¡cha!".

Lo dejo a su respetable consideración. Y espero que no me den con el cha.

6 comentarios:

Fodor Lobson dijo...

Recomiendo escuchar canción del ochentoso grupo español Gabinete Caligari, que dice así:
La culpa fue del cha cha cha
sí, fue del cha cha cha
y escondiendo mi capote,
yo me asomaba al balcón de tu escote

Carpe diem dijo...

Me parece muy bien. Dan ganas de hachar (o mejor dicho: de ‘char’) al compás del cha-cha-cha... Y de paso tendremos otro curioso matrimonio lingüístico: el CHA (“bien machito”) y la CHA (Comunidad Homosexual Argentina).

¡Hacha la cucaracha! (¿Esta frase que tanto me gusta podrá pervivir como arcaismo?)

Saludos.

Gasper dijo...

El problema quizás se presente cuando, para no crear mayor confusiones, algunos decidan bailar al ritmo del hacha hacha hacha.

(ok, llamen al verdugo, corre por mi cuenta)

Libelula de Acero dijo...

Cha e té en varios idomas.
Y se sabe que con esto de la globalización se migran las palabras a lo loco.
Asique sería muy poco conveniente que pidamos el cha y nos dén una herramienta cortante en el medio de un bar.

Anónimo dijo...

Libe: Podemos transar y decir que CHA también es un té cortado (con leche)

Anónimo dijo...

Cuidado, porque un estornudo puede ser considerado como una declaración de guerra.